jueves, 14 de junio de 2012

La felicidad.

Me despertaba por las mañanas y lo primero que oía era la misma cantinela, todos los días: "Pepe, deberías tener mas ambición y aspirar al puesto de jefe que te han ofrecido tantas veces".
Sé que iríamos mas desahogados económicamente, pero por otra parte dejaría de tener el puesto que ocupo, con el que me encuentro verdaderamente a gusto.
Ella insistía día tras día, argumentando que nuestra economía mejoraría sustancialmente, aunque tuviera que hacer un pequeño sacrificio: Mi felicidad.
Una mañana encontré la solución para resolver nuestros problemas económicos, sin sacrificar mi felicidad... me separé de mi mujer.

javitxu.

4 comentarios:

  1. La eterna pregunta, el dinero da la felicidad?
    A mi me parece que no, y es que hay cosas que aunque no pueden valorarse económicamente nos aportan más satisfacciones, a corto, medio y largo plazo.
    Y si para conseguirlo hay que hacer algunos sacrificios, siempre podemos alegar que son necesarios...

    Besitos mediterráneos.

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    1. Ey guapetona, cuanto tiempo sin saber de ti.
      Sabias palabras.

      Un besazo. ;-)

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  2. jajaja pues sabes qué? Me parece correcta la decisión de Pepe. La felicidad de uno mismo por encima de todo. Y en este caso más si cabe, porque a su mujer la felicidad de él le importaba bien poco...
    Besitos.

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  3. Qué bueno reencontrarme con estas cosas. Microrrelato verdaderamente micro, directo y al grano, jaja!

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